El franquismo, sencillamente, había aceptado ceder parte del poder a los recién llegados, especialmente al PSOE. (Juan Carlos acababa de cumplir 30 años, la edad mínima para ser rey). Votan el 155 y avalan la represión. Una misión y un programa compartido por una buena parte del PSOE.Recordemos una cosa aquí por si alguien no lo tiene bastante presente. Juan Carlos no se convirtió en jefe de gobierno (equivalente a primer ministro). Sin embargo, durante todo su tiempo en el cargo, no hubo rey de España. Un PSOE que, a su vez, fue renunciando a sus anhelos de cambio para convertirse en el segundo, e imprescindible, gran pilar en que se asentaba y asienta lo que algunos llaman, pienso que a estas alturas con razón, "el régimen del 78". Les espeta a Pablo Casado y Santiago Abascal que, si quieren preservar la monarquía, dejen de apropiársela: "Quizás paradójicamente se hayan convertido ustedes en la mayor amenaza contra la monarquía en España".No es el primero, Iglesias, que se da cuenta de como los sucesores políticos, familiares y sociales del franquismo son dependientes de la monarquía ―y cada vez más la monarquía de ellos―.Una cosa muy parecida a lo que señaló Iglesias, pero vista desde el otro lado, había dicho dos años antes Fernando Suárez, ministro con Franco, en una entrevista en Fernando Suárez llama a defender al rey. Así es como se llega al año 2000 y a la mayoría absoluta del PP. Hay menos margen, en la medida en que la información que circula por internet y las redes sociales es imposible de controlar y que el crédito de la monarquía, junto con el del sistema que simboliza, se ha ido agotando. Un pacto que para los que venían del franquismo había sido un punto de llegada, el tope máximo, mientras que para las fuerzas democráticas ―entre ellas el catalanismo― había sido un acuerdo de mínimos, un punto de salida. La sentencia contra el Estatut de un Constitucional parcial y títere hiere de muerte la esperanza fundacional del catalanismo de que Catalunya llegaría a poder convivir con España siendo respetada y escuchada.Mientras tanto, Juan Carlos I, al cual el 1969 Franco había nombrado su sucesor, calla. En realidad, hacen un esfuerzo por relanzar un régimen que ven amenazado no solamente por el independentismo sino también por la irrupción de Podemos.Con el último escándalo de la monarquía, los aparatos del Estado (y muchos medios de comunicación) intentan hacer lo de siempre: intentar esconder el asunto, menospreciar su gravedad y procurar que la gente se olvide rápidamenteLa crisis que estalló en 2008 y el descontento global contra los gobiernos acabarían dando lugar a un panorama político mucho más diverso.

Podemos nace en 2014 cuestionando frontalmente el Poco a poco, el rey ha ido quedando identificado sobre todo con la derecha y no ha hecho nada para evitarlo ―el mismo error que cometió su bisabuelo, Alfonso XIII, que tuvo que acabar huyendo de España―, una derecha que, en su esfuerzo por mantener el sistema en pie, ha asumido con entusiasmo la defensa a ultranza de la figura de Felipe VI.Justamente, Pablo Iglesias, el líder de Podemos, retrató esta situación en una agitada sesión en las Cortes este enero. Con el último escándalo de la monarquía ―que no será el último―, el de los 100 millones, los aparatos del Estado (y muchos medios de comunicación) intentan hacer lo de siempre. Fransisco Franco, el dictador de España desde 1939 hasta 1975, fue monárquico. Vox todavía no está en las Cortes.
A pesar de que las caras visibles del 23-F tuvieron que ser sacrificadas, el objetivo no lo fue. También cambiaría @ SJuan76 Wikipedia dice "Como conservador y monárquico, se opuso a la abolición de la monarquía y al establecimiento de una república secular socialista en 1931". ¿Te ha parecido interesante este artículo? El último jefe de gobierno de Franco y el primer Juan Carlos fue Arias Navarro. Mi pregunta es, ¿por qué Franco no restableció la monarquía española mientras aún estaba en el cargo? Desde su injustificable y gigantesca fortuna (cifrada por el Pasqual Maragall lanza la idea ―que Pujol nunca compartió, porque sabía que podía convertirse en un bumerán― de un nuevo Estatut. El cúmulo de ofensas y frustraciones posteriores ―empezando por la campaña de recogida de firmas contra el Estatut empezada por el PP― acaba con la paciencia de muchos catalanes, que llegan a la conclusión de que el pacto de la Transición ha sido traicionado. El régimen nacido de la Transición se siente amenazado, dado que la monarquía es el símbolo y piedra de toque de todo el edificio.

Sin embargo, la muerte de Carrero Blanco podría haber ayudado a liberar las manos de Juan Carlos. Eso te hace sospechar que Franco tuvo buenas relaciones con la monarquía. Para seguir garantizando una información comprometida, valiente y rigurosa, necesitamos tu apoyo. Intentar esconder el asunto, menospreciar su gravedad y procurar que la gente se olvide rápidamente.No obstante, este tipo de operaciones, tantas veces repetidas del 78 hasta esta parte, son cada vez más difíciles de culminar con éxito. No es otra cosa que la eclosión, ahora de forma explícita, sin vergüenza, haciendo bandera, de aquel programa regresivo que se empezó a gestar al día siguiente del 23-F.Los sucesores políticos, familiares y sociales del franquismo son dependientes de la monarquía ―y cada vez más la monarquía de ellos―Mientras tanto, Juan Carlos I se ha ido identificando exclusivamente con el bipartito que manda en España. Franco nunca fue derrotado. Es decir, sólo con una parte del país. Si es así, ¿fue esa la justificación oficial que dio a la gente, o dio un pretexto que fue menos egoísta? Un llamamiento que, en realidad, rompe el encargo que el artículo 56 de la Constitución ―el rey “arbitra y modera el funcionamiento regular de las instituciones”​― hace a la monarquía.PP, PSOE y Ciudadanos cierran filas.